Son varias las veces en que se ha preguntado por “cortatientos”. Yo los conocí como tarjas y, dado que tuve que armarme una nueva, tomé algunas fotos para quienes puedan estar necesitando datos.
Partí de un bloque de algún tipo de nylon que sobró de un trabajo, de 33 x 33 x 24 mm, al cual corté a la mitad (pues voy a hacer dos).
Encontré en uno de estos lugares que venden cosas usadas unos cuchillos de muy buen acero o, por lo menos, como me gusta a mí. Para hacer esta herramienta busco cuchillos flexibles, de acero al carbono (no acero inoxidable) y que, al golpearlos ligeramente contra una superficie dura producen un sonido agradable (no sordo).
Para alivianar la tarja, lo cual ayuda a su funcionamiento, es necesario desencabar los cuchillos. En este caso en particular, dos de los cuchillos tenían cabo de fundición de aluminio, el cual removí por desbaste, cuidando de ir refrigerando la hoja. El cuchillo restante, tiene relleno probable de plomo. Tanto en este caso, como si fuera lacre, lo saco calentando el cabo. Eso sí, hay que tomar la precaución de hacer un agujero en el cabo para permitir el escape de gases, caso contrario alguien puede salir lastimado pues el cabo sale disparado como misil. Ah! Y para proteger la hoja, es conveniente clavar una papa bien contra el botón. Luego, agarran el sobrante de la hoja en una morsa y comienzan con el tema del calentado.
Volviendo a nuestra tarja, una vez cortado el bloque a la mitad, se marca el centro y se agujerea. Yo hago un agujero de desbaste y otro, con la mecha definitiva, de terminación. Esto es recomendable hacerlo con un taladro de banco.
Para determinar el diámetro del agujero, lo que se hace es tomar el ancho a la mitad de la hoja y, de ahí, se calcula entre 1mm y 1,5mm menos. Si la hoja tiene 17, es recomendable hacer un agujero de 15,5mm o 16mm. Ello permite que la hoja luego se clave y quede firme.
Por último, con una ingletadora o, en su defecto, con una sierra de mano (la pequeña) con hoja para madera (que no hay para la sierra grande) marcamos -cortando poco profundo- primero al frente y luego a los laterales y procedemos a cortar. La idea es llegar a pasar ligeramente la mitad.
En este caso, el corte fue de 18 mm de profundidad. Como recomendación, es conveniente hacer un corte hasta la mitad, clavar la hoja y probar si funciona. Para alargar el corte siempre hay tiempo. Una vez hecha la ranura, yo la repaso con lija para madera antiempaste grano 150.
Por último, se clava la hoja, la cual fue previamente afilada. Nota: la hoja no se clava recta, sino con un ligero ángulo. El filo apunta hacia adentro y el lomo hacia fuera. Les muestro algunas ya hechas:
Casi me olvido! En esta oportunidad ocurrió un milagro. Yo buscaba lograr una tarja que me permitiera sacar tientos de 0,9mm de espesor. Lo logré al primer intento. Llevo hechas varias, pero es la primera vez que tengo esta suerte. Comparto con ustedes la tarja terminada y el primer tiento que salió de la fábrica! Espero les sirva!